jueves, 26 de mayo de 2011

Especial de revista

Hay una publicación mexicana que suele acompañarse de un suplemento llamado "Vivan las Curvas", el cual aparece cada determinado tiempo. Realmente nunca le había prestado mucha atención. Tal vez porque no me interesaba el tema, o tal vez porque no me sentía lo suficientemente femenina para que me preocupara en leer una revista de este tipo.

De repente trae mensajes positivos como el hecho de tener una alimentación más balanceada, no dietas milagrosas,  como la mayoría de las demás revistas. También incluye una sesión de fotos con las tendencias en moda y unos que otros tips adecuados a nuestras características, además de las típicas cátedras sobre autoestima que siempre le vienen bien a alguien.

Lo que me pareció aberrante (al principio, porque luego me dio mucha risa) fue que precisamente en ese suplemento (el cual ya tiene unos años pero que lo acabo de encontrar tirado en mi cuarto) aparece un artículo sobre el sexo y la comida. Es decir, cómo puedes, y disculpen la vulgar expresión, coger y tragar al mismo tiempo.

El artículo comienza con esta frase: "Amar la comida no es un delito", y luego continúa con una pequeña descripción histórica en contexto romano. Más adelante encontramos sugerencias sobre cenas románticas y/o eróticas, aunque en un punto prácticamente incitan a preparar un buffet... para que puedas "irte a la cama con el estómago y el corazón contentos", siempre y cuando no te de un empacho o un infarto.

Si hay algo que a las autoras de este espacio nos molesta, es el tener que encontrarnos con la idea ajena de que si estamos pasadas de peso es porque todo el tiempo estamos pensando en comer y lo hacemos. Y lo más ridículo es que el artículo que comento está ilustrado con diversas posiciones sexuales que, además, te indican cómo embutirse a gusto durante el coito.

Citando textualmente: 
 
"Fijate que en todas las posiciones, excepto la del perrito, uno de los dos queda con las manos libres para ir degustando alguna exquisitez de las que preparaste en plena acción".

Jajajajajaja como para que alguno se atragante y el otro ni se entere de tanta calentura.

No culpo a la que lo haga. siempre es bueno probar sensaciones nuevas, es más, lo apoyo. Pero, a ver... por qué no publicaron este artículo en la "sección de flacas". No todas tenemos relaciones con un "feeder" ("Feederism" en inglés, describe relaciones sexuales donde ambos individuos obtienen gratificación por medio de la ganancia de grasa y volumen corporal). Para ejercitar el sentido del gusto, existen aceites y polvos que, además, tienen otras funciones, porque, honestamente, si algo quiero llevarme a la boca durante el sexo no es precisamente una galleta.

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